El Gran Yo Soy
No sé exactamente cuándo comenzó "el principio de dolores", no es necesario ser profeta para darse cuenta de ello. Hoy necesitamos retornar a El Gran Yo Soy, El mueve su mano en favor de sus hijos. El mundo y sus deleites giran en su propia desordenada órbita, es momento de salir de ella. Oremos sin cesar, pues la oración del justo tiene mucho poder. Dios es bueno. Shalom.